No puedo creer que mañana es lunes 1 de octubre. Es que cuando entran los meses “bre” el tiempo vuela, se acabó septiembre y ya en algunos almacenes hay adornos de Navidad a la venta.
Empecé este blog/reto el 5 de mayo de este año, con 39 recetas por hacer. Ahora solo me faltan 15 que tengo que hacer antes que acabe 2018.
El plan es postear la última receta el domingo 23 de diciembre, en víspera del 24 de diciembre, de Navidad y del día que #QueridaJulia decidió descansar en paz; así que hoy voy a hacer lo mismo que que han hecho los almacenes, voy a adelantar esta entrada que realmente debe ser de las últimas.

La idea de compartir con ustedes este proyecto surgió de una conversación en una oficina de La Prensa con María Mercedes de Corró. Chelle me comentaba que por qué no me proponía hacer algo que conectara con la audiencia de alamesa.pa. Yo con mucha pena y mucha duda le comenté que tenía algo, pero no era innovador, que, es más, era algo así como la copia de la película Julie & Julia y que no sabía cómo iban ustedes, los lectores, a reaccionar…
Le conté del recetario que me había llevado del apartamento de mis abuelos. Le enseñé las fotos de la primera receta que había hecho el 28 de abril , la malva. Chelle me dio el empujoncito final y me dijo dale… y a mí que me encantan los retos… le di, y en esto estoy.

Casi todas las recetas tienen un cuento, que no son cuento, son mis verdades. Por ejemplo la de hoy… es una receta sin cuento, cuando la vi men provocó hacerla, me encantan las torrejitas, las he comido de maíz, de bacalao y de cambombia, me falta probar las de camarón.
Les confieso que he llorado más de una vez frente a la computadora y me he reído más de 23. He disfrutado hacer cada receta y tomar las fotos con mi teléfono en la terraza de la casa a las 8:00 de la mañana cuando la luz es la más bonita. He reconectado con tías, abuelas y primas, con las que no me había cruzado más de una palabra en la vida. He usado las vajillas  y bandejas «del año del pum» de mi abuela y mi mamá en cada foto. Mis hijas me han visto cocinar y se han involucrado. Mi familia me ha reclamado que yo cocino y cocino y que no dejo nada en la casa… que todo se lo llevo a mis compañeros en La Prensa. He leído y dado like a cada comentario en redes sobre las fotos que posteo los domingos con las recetas y me emociono cuando me encuentro a personas en la calle que me cuentan que me han leído y que les recuerdo a su abuela, a su familia, a sus tradiciones. Hay gente que ha hecho las recetas y me ha compartido las fotos, me cuentan que la disfrutaron en familia y eso a mí me ha llenado. Me han preguntado miles de veces qué va a pasar cuando se acaben las recetas, y yo siempre contesto: “bueno… se acabaron”. Me dicen que me van a extrañar, y la verdad es que yo también, así como extraño a mis abuelos todos los domingos a las 5:00 de la tarde, la hora en que los iba a visitar. En verdad no le he metido mucha cabeza, por eso de que no me gustan las despedidas…
Hoy les dejo la receta 16 en orden descendiente, unas torrejitas de camarón con pan, muy fáciles de hacer.
Los invito a leer todos mis cuentos en www.alamesa.pa.

Receta 16: Torrejitas de camarón con pan